Al fin parece que alguien se atreve a ponerle límites a la delgadez de la actriz norteamericana
Lindsay Lohan. Si no lo pudo hacer ella misma, su familia o sus amores, ya era hora de que alguien lo hiciera.
Los productores de su próxima película «The other side» le han ordenado a la actriz que descanse y que engorde. Si no lo hace no podrá empezar a grabar.
Sucede que los productores no quieren problemas durante la grabación por su delicado estado y además quieren que luzca como una persona saludable. Cosa que en la actualidad esta actriz no demuestra.
Una fuente cercana a la actriz afirmó al respecto:
«Los productores quieren que Lindsay luzca como una persona normal y sana, no como un esqueleto».
Bien por los productores y esperemos que Lindsay Lohan les haga caso…es por su bien.